Pienso que las instituciones bancarias son más peligrosas para nuestras libertades que ejercitos enteros listos para el combate.
Si el pueblo americano permite un día que los bancos privados controlen su moneda, los bancos y todas las instituciones que florecerán en torno a los bancos, privarán a la gente de toda posesión, primero por medio de la inflación, enseguida por la recesión, hasta el día en que sus hijos se despertarán sin casa y sin techo, sobre la tierra que sus padres conquistaron.
— Thomas Jefferson, ex-presidente de EEUU, 1802
Los siguientes textos han sido extraídos de los breves artículos de Wikipedia sobre Banca ética y Economía social.
Aproximación
[La Banca ética] surge como parte de los movimientos de economía alternativa que buscan una economía real y cuyas actividades produzcan un impacto social o medioambiental positivo.
Por economía real se entiende toda aquella actividad económica no especulativa y fuera de los mercados secundarios [dedicado a la compraventa de valores que ya han sido emitidos en una primera oferta pública o privada]. Esto es que los proyectos financiados con el crédito de la banca ética deberán generar directamente bienes o servicios. Esto también excluye la concesión de créditos para el consumo personal. El impacto positivo, ya sea social o medioambientalmente hablando, significa restringir las actividades financiables a aquellas que cubran servicios necesarios y abandonados por la banca tradicional debido a su baja rentabilidad. Esto se logra desterrando una serie de proyectos (armamento, prostitución, extensos monocultivos intensivos, tabaco…) y priorizando otros (comercio justo, atención a colectivos en riesgo de exclusión, educación…).
Un poco de contexto
Ciertos escándalos públicos de corrupción en Estados Unidos y conflictos políticos internacionales (la guerra de Vietnam, el régimen del apartheid en Sudáfrica…), hicieron que la ciudadanía y una serie de colectivos tomasen conciencia de que la relación ahorro-crédito estaba completamente controlada por los bancos, es decir, los ahorradores y legítimos dueños de ese dinero no tenían capacidad para decidir sobre los créditos que se concederían con su ahorro. De esta manera, el ahorro de una ONG que trabajara por la paz podía estar siendo invertido en armamento.
Dr. Muhammad Yunus, es un banquero y economista de Bangladesh. Es el desarrollador del concepto de microcrédito. Los microcréditos son pequeños préstamos concedidos a personas humildes que no califican para un préstamo bancario tradicional. Fundador del Banco Grameen, fue galardonado con el Premio Nobel de la Paz.
En 1974 propuso una forma de organización social para aldeas rurales denominada «Gram Sarker» (gobierno rural). La propuesta demostró ser practicable y útil, por lo que en 1980 fue adoptada oficialmente por el gobierno de Bangladesh. Desde esa época, debido a la hambruna que asolaba a este país (uno de los países más pobres y poblados del mundo), tomó conciencia de que sólo se puede salir de la pobreza superando las leyes del mercado, proporcionando microcréditos: créditos solidarios sin garantía a los más necesitados para que puedan realizar una actividad independiente y creativa.
A menudo se dice en este contexto que las personas que menos recursos tienen son mucho más fieles a la hora de devolver los préstamos que aquellas que más recursos disponen.
Dos tipos de banca ética
Aún teniendo como objetivos los citados anteriormente, economía real e impacto positivo, se puede hacer una clara distinción entre dos tipos de banca ética:
Banca ética
El derecho a voto depende de la participación en el capital social o de la proporción de activos poseídos respecto al total emitido. Es decir, que los que deciden qué se hace con el capital son aquellos miembros que contribuyen en mayor medida. Un ejemplo de estas entidades es Triodos Bank.
Banca ética cooperativa o ciudadana
Sistema de gobierno asambleario en el que todo usuario del banco tiene un voto de igual peso, sin considerar el capital invertido en dicha institución. Una persona, un voto. Suelen tener una mayor acogida en las asociaciones del Tercer sector (que incluye cooperativas, organizaciones sin ánimo de lucro y de caridad) que entre particulares y empresas. Los ejemplos más conocidos son FIARE y Coop-57.
Mientras el primero hace cosas sociales, en el segundo la toma de decisiones es democrática, todos los miembros tienen la posibilidad de decidir qué proyectos económicos apoyar.
¿Y cómo puedo participar yo?
Puedes ver el anexo de Wikipedia que compara las Finanzas éticas en España (no he encontrado un anexo parecido para Sudamérica).
En él podrás ver que a día de hoy, salvo con Triodos Bank, es imposible tener los servicios bancarios a los que estamos acostumbrados, como una cuenta corriente o disponer de tarjetas de débito/crédito. Por el contrario, las opciones comunes son depositar dinero sin recibir intereses (que puedes recuperar con facilidad) o bien, si existe la posibilidad de recibirlos, el porcentaje siempre es bastante menor de lo que acostumbran las bancas normales (aunque esto era imaginable), contribuir mensual/anualmente y hacer donaciones. Y por supuesto, si eres socio tienes tu voto para tomar decisiones sobre qué proyectos apoyar.
Probablemente un buen compromiso es dejar gran parte de los ahorros en una cooperativa/asociación/banca ética y utilizar una tradicional (preferiblemente una caja de ahorros que un banco) para domiciliar, usar tarjetas, etc., si resulta especialmente útil.
En 2013 FIARE comenzará a ofrecer los servicios tradicionales (tarjetas, cuentas corrientes, banca por internet, etc.), por lo que probablemente será especialmente fácil dejar tu viejo banco por uno ético cooperativo.